martes, 25 de agosto de 2020

Del peldaño a la traviesa,

el látigo, el castigo,

la pregunta sin respuesta.

La cuesta que asciende a balazos,

los ojos de ácido, 

hacen rechinar el abismo.

La tez quedando mustia,

el temblor de entre los dedos,

me quedo mirando el aguacero, 

esquivando manos tendidas.

Me rindo y me refuerzo,

me caigo, duermo y me desvelo;

Las horas me señalan al segundo ,

y cuanto más me quiero, más me desquiero.

De abrazos mal queridos,

trozos de cielo pisado,

no me quedan más de siete sentidos,

porque el octavo te lo has llevado.

sábado, 15 de agosto de 2020

Pasarán los días como un proceso necesario,
callando los pasos a tu sentido.
Si te aprietas las manos seguirás teniendo el nudo.
Aprieta, destripa y abraza.
Inestabilidad y agudeza, el miedo del cobarde. 
Que no huye siquiera,
que no destapa coraza,
que se queda quieta.
Que se atiende a la amenaza.
De mil manos tendidas,
el subsuelo arrastra más fuerte.
Y quedo temblando,
con el silencio a mi corriente.


martes, 7 de julio de 2020

Debilidades

Al pie de lo fugaz
entre risas y desolvidos,
las entrañas envueltas en papel viejo
y el ruído, siempre ruído.
Del hervidero,
de las malas hazañas
del olor del acero, del óxido a tus entrañas.
El desrugir, el sofoco,
el olor a bestia entre sábanas de satén,
y la desidia del hastío volviéndonos locos
esperando la cordura llegando tarde al andén.
Sé mi tren,
tú sé mi tren,
entre mares revueltos, 
y piérdeme en un vaivén.
Recoge la rutina,
en la maleta no caben nuestros pies,
que para ser fosa hay que cavar profundo,
y para profundizar con versos
el atajo lo plasmo con besos
de mi boca hasta tu piel.


domingo, 5 de abril de 2020

Morfina en metáforas,
la explicación indeseada
me muestro de hierro
pero me sabe ametrallada.

Me invento una tregua
después de perder la batalla
si quieres me salvas,
o déjame que me vaya.


jueves, 2 de abril de 2020

En el latiente a medio paso de la nada,
en el subconsciente recordando que me podía mentir pero no me engañaba.
En el trastero quedaron los viejos momentos,
en el recuerdo se fustigan los remordimientos.
Tus -quédate- a momentos
frente a mis -si es a ratos mejor vete- por siempre.
Que de un delirio se hizo mi caos,
y ahora el enrevés me sigue la corriente.
Más que de acero, de malva y espinas
debajo del aguacero, espero a ver cómo apacigua.
Más no del temporal
sino de las sonrisas de mal tiempo
poniéndose en mi lugar,
quedaría sin aliento.
Y no sabrá de mi tempestad...
¿Te apetece bailar un último vals?
Y de paso, si quieres, te lo cuento.






miércoles, 25 de marzo de 2020

Y fueron encerrados
como los pájaros a los que metieron en jaulas
y tejieron telarañas
de retales de recuerdos,
algunos en desquicio,
algunos en sano juicio,
se despiadó el corazón
y voló.
Y fue aún más intenso todo,
de un momento a otro,
la apatía se cubrió de lodo,
la empatía le gano el terreno al odio.
Siendo más fieles,
pero mucho menos de sentimiento,
acariciando a kilómetros
entendieron la necesidad de confinamiento.
Y los cantes y las plumas salieron con el sol,
a la sombra del vacío, la añoranza se tiñó de color.
Se cerró lo innecesario, nos contagiamos de serenidad,
se abrió paso sólo a lo indispensable,
y nos dimos cuenta de nuestra valentía a pesar de que antes nos tachasen de cobardes.
Y se unió la tierra con el corazón,
y dejamos respirar al mundo,
las nubes palidecieron su color
y floreció el musgo.
Y vimos perecer
y escuchamos sonreír,
conseguimos aprender a querer
y a soñar el porvenir.
Imaginamos los recuerdos
nos miramos a los ojos en forma de reflejo,
nos apretamos fuerte las manos a través de pantallas ;
y nos atrevimos a decirnos: -no quiero que te vayas-.


jueves, 19 de marzo de 2020

Lie to me
Lo ultrasensorial toma nota
el corazón aguarda la última carta,
tu As bajo la manga
deja en jaque a mi coraza.
Tus medias tintas pintaron mi lienzo entero,
su toxicidad atípica impacta en mi desvelo. 
Me parto por la mitad, para abrir a medias un párpado, dejando un ojo ciego.
Porque ojos que no ven,
corazón que muerde el anzuelo.

miércoles, 18 de marzo de 2020

Incertidumbre se apodera
a través de la jaula veré la realidad
necesaria de amor desabastecido
llena y vacía de serenidad.
Tan de cal,
que no sé cómo la arena no me entierra,
tan de los demás
que cuando digo mía, me creo quimera.
Me has visto caer y levantar
alzar las alas al volar,
desbordar como un vaso de tequila,
cubierto de lágrimas, limón y sal.
Búscame cuando anochezca,
veremos las luces brillar.
Que nunca estuvimos tan cerca,
estando alejados, cada día un poco más.


martes, 10 de marzo de 2020

Equivócate.  

De nada valen los pájaros en la mano,
a mi me gusta ver los cien volando.

Equivócate 
y échale sal a las heridas.

Equivócate 

con los ojos bien abiertos, que sienta el corazón fuerte.

Equivócate

porque más vale pronto, que para siempre.

Equivócate.



Pero equivócate conmigo.





lunes, 9 de marzo de 2020

Hecho de sueños incumplidos,
de noches de verano
de estrellas insólitas,
una galaxia en sus manos.
Te veo y casi no quiero ni mirarte,
se me acelera el pulso y me inquieto...
no sé cómo no besarte.
Careces de lo que carece la humanidad,
la vanidad y su desgaste,
eres lleno de perplejidad,
de calidez,
de un carisma aplastante.
Eres la línea de la incertidumbre,
y cuando toma forma huyo,
pero si me pides que me quede una vez más
pongo mi coraza en tu puño.


Y ahí estaba yo,
haciéndome pedazos,
autosaboteándome,
cronometrando la siguiente caída
la siguiente calada
que me dejase de ojo vuelto y temblor intrínseco.
El olor a desvivo,
lo inmortal pereciendo.
La moralidad pasajera y el recuerdo angustiado.
Aferrarse.
No soltar la mano a lo vivo, me hacía cada vez más mortal.
Apego y miedo.
El flasheo contínuo, la dilatación de las pupilas.
Parálisis.
Dolor exhumado.
Éxtasis.
Tocar el cielo en la pasarela infernal.
Ceguera, toxicidad.
El tacto desapareciendo.
Desvirtud, disculpas, despedidas.
Asonoro.
Intactil.
Ageusia e hipogeusia.
Asfixia.
Agonía.
El desentir que hizo lo eterno vital en pétalos caídos.
El color de ojos perdidos.
El olor a ácido y a desdicha.

Y resurgir como el ave fénix.

miércoles, 26 de febrero de 2020

19'

Una vez más las espadas son protagonistas
y las paredes se me clavan en las costillas;
Esa sensación de aleteo apresurado,
de metamorfosis lleno el alma,
las mariposas se han escapado
porque no las puse en jaula.
La inmersidad de lo erróneo,
la dureza del asfalto,
lo supuesto equívoco es idóneo
si se pronuncia con tus labios.
Me caigo y no levanto, si el suelo es cómodo a cada paso
si la muchedumbre me carga la espalda de culpa
me quedo a vivir en el engaño;
Pero si me das diecinueve minutos,
transformaré en vida
todo tu daño.

lunes, 24 de febrero de 2020

Del error nació el acierto
del refugio a tus manos heridas
Seré el cantar de un pájaro inquieto
enjaulado a tu despedida.
Tu incertidumbre quema y hiere
hace membranas sin desmedida
el pesar que nubla lo que se quiere
hace escamas en las heridas.
Me pesas como pesa el cemento de mis párpados
fruncidos al verte regresar,
huyo ante la similitud de nuestro letargo,
me quedo para ver cómo te vas.
Te acercas, y no sé si herir o helar,
cerrando los ojos el corazón no siente,
destrozando en un segundo toda mi realidad.
Unidos somos comos dos inconscientes
sin miedo al juicio final,
te clavas en el pecho como una daga ardiente
haciendo cenizas antes de quemar.
Y si te vas, hoy quédate fuerte,
para en lugar de menos, poder echarte de más.

martes, 18 de febrero de 2020

A tres pasos toca fondo
hallando muralla bajo el escombro,
de elocuencia me retuve
andando ciega, con la cabeza en el suelo y el corazón en las nubes.
¿Qué será de este febrero febril que ha tomado conciencia de sereno?
será que tus lunas de verano quedaron dormidas al ver nuestra lejanía a mitad de desvelo.
Me tiemblan las cicatrices, hechas de almíbar y cianuro
y cuando llega la marea, el corazón se me hace impuro.
Me acobarda el presente, si el futuro toma forma,
me quedo a mirarte de frente, con los ojos escondidos tras las alfombras.
Quedaré en incertidumbre, mientras tú clavas tu seguridad en mis pestañas,
yo seré indigente,
limosneando tener cabida siquiera en tus entrañas.

sábado, 15 de febrero de 2020


Saqué de rutina sus ojos
como un café de madrugada
revuelve lo inequívoco y dudoso
encendiendo una luz apagada.
Me hace trizas a la par que me llena el alma;
me lazo a contracorriente,
porque sus olas dejan mi mar en calma.


viernes, 7 de febrero de 2020

Equilibrios inestables

Me sé los límites
de la descordura a medias palabras
he sabido del manjar
del ámbar
de tu sonrisa alejada
de tu mal tiempo
de las treguas y las medias astas.
Si te vas a marchar, márchate rápido que no duela
que el sinsentido sea protagonista, pero que no hiera .
Atraviesas las fronteras,
y un día más revuelcas un pedazo de mi alma
de la que precedes
y si te vas a alejar, aléjate antes que te pida que te quedes.
Duéleme, como dueles a ciegas en mis ojos,
nublado, de norte a sur, quedando mi sensatez en rastrojos.
Que me comen las rarezas, las cosquillas aprietan la tráquea,
quédate cuando enmudezca,
y cállame a media palabra.

 

miércoles, 29 de enero de 2020

Metáforas

¿Has sentido esa sensación,
en la que sientes que se te llena
y se te vacía el corazón?
¿Sientes el letargo, los pasos alejados, el silencio que hace ruído,
mi murmullo como el de un pájaro alicaído?
Seguir siendo metáfora,
arruinarte el desenfreno, y pesarte los días.
Toneladas.
Motivos y desmotivaciones.
Pasado vuelve a la coraza.
Emociones.
No tendré palabras pero tengo mil razones.
El sinsabor vuelve a la boca y me pierdo un día más.
Pasarán nuestros trenes y seremos pasajeros.

Para no mirar atrás.
Para no echarte de menos.

viernes, 24 de enero de 2020

Tarde

Tarde,
porque llegar tarde a veces significa llegar a tiempo.
Llegar en el momento exacto, antes de la hecatombe.
Justo antes del eclipse. En el momento adecuado.
No sé cuándo perdí la noción del tiempo,
ni la de la realidad
no sé en qué momento me perdí
o en cual me encontré
o si me perdí realmente
o si sigo sin encontrarme.
Tarde,
como cuando cae la mañana y el sol se asoma sigiloso mirándote con juicio.
Tarde,
porque la prisa es más importante,
siempre tarde.
A veces llegamos sin permiso,
a veces rompemos sin motivo,
nos autoembaucamos  para justificarnos,
para justificar que hemos llegado tarde.
Nos autoconvencemos para justificar
que nos llegan tarde.
Más que temprano, siempre tarde.
Hoy no leerás prosa,
me leerás presa en mi propio sinsentido,
que no sinsentir,
con mayor tranquilidad autoinfligida
menos arriesgada
y más tarde que nunca.
Se hará tarde y no estaremos,
no será esta tarde, ni la tarde de mañana.
Llegaremos tarde una vez más.
Y tal vez no sea ni siquiera lo que queremos.
Tarde,
para echar la vista atrás.
Tarde,
para no echarte de menos.





miércoles, 15 de enero de 2020

Inoportuno y necesario,
repentino y detonante
vi los restos del naufragio
navegar por tu semblante.
Quedóme rota
pero alicatada hasta la médula
tus melodías y mis notas
bailando siempre en la misma cuerda.
Idilio utópico, mis manos dibujarán tu sonrisa,
seremos únicos
aunque nos despeine una vez más la brisa.

viernes, 10 de enero de 2020

Ruletas rusas con armas en el pecho,
atienta el fuego amenazando con quemar el camino hecho
Desenfreno momentáneo, mis ojos guardarán el secreto,
si te quedas un minuto más te enseñaré a parar el tiempo.
Y es que yo no sé cerrar la puerta
si tus ojos son mi oxígeno,
si me quedo atrapada y confusa
perdiendo el equilibrio.
Si he perdido la cordura,
déjala que no la encuentre
yo me quedo en tu locura
aunque tentemos a la suerte.